- Bienaventurados los pobres en el espíritu, porque de ellos es el reino de los cielos.
- Bienaventurados los mansos, porque ellos heredarán la tierra.
- Bienaventurados los que lloran, porque ellos serán consolados.
- Bienaventurados los que tienen hambre y sed de la justicia, porque ellos quedarán saciados.
- Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia.
- Bienaventurados los limpios de corazón, porque ellos verán a Dios.
- Bienaventurados los que trabajan por la paz, porque serán ellos llamados hijos de Dios.
- Bienaventurados los perseguidos por causa de la justicia, porque de ellos es el reino de los cielos.
- Bienaventurados vosotros cuando os insulten y os persigan y os calumnien de cualquier modo por mi causa. Alegraos y regocijaos, porque vuestra recompensa será grande en el cielo.
(Mt 5,3-12)
29
Ago