
Navegación del Evento

A primera hora del día el fabioler ya vuelve a estar en la calle para hacer el replec, y a las ocho de la mañana va al palacio del cajero señor a pedir permiso para iniciar los actos de la primera parte del día.
El acto más importante de la mañana y el más importante de carácter religioso de las fiestas es la Misa de los Cajeros, que se celebra en la Catedral, después de que la cuajada haya ido al llano de Sant Joan para que los caballeros prueben los juegos que tienen que hacer al fin, y hayan hecho las Corridas en ses Voltes y el Caragol de Santa Clara.
La bebida del caixer capellà en el Seminario, después de la Missa dels Caixers, cierra los actos de la mañana y precede a una nueva solicitud de permiso del fabioler en el palacio del caixer senyor para iniciar los actos del fin de semana y de la noche del Dia de Sant Joan.
Después de la Convidada a l’Ajuntament (plaza des Born), la cuajada desciende al llano de Sant Joan, donde se hacen dos caragols (uno al principio y otro al final) y los juegos de l’ensortilla, de romper las carotes y de córrer abraçats. Es, junto con el Caragol des Born del Sábado de Sant Joan, uno de los momentos de máxima atención y de más peligro de las fiestas.
Si queréis ver bien cómo son estos juegos, será necesario que estéis muy atentos a los avisos del fabioler, que no perdáis de vista a los caballeros que toman parte y que respete el pasillo para el paso, al galope, de los caballos. En caso contrario, no podréis disfrutar de este espectáculo inimaginable y estaréis en peligro.
Acabados los jocs i caragols del Pla, la qualcada vuelve, igual que la noche anterior, a ses Voltes y acaban las fiestas con el Caragol de Santa Clara y la bebida en el palacio del caixer senyor.
Si se quiere alargar un poco más la fiesta, hay que esperar a que los cavallers salgan de cal caixer senyor y, ya de madrugada, vayan a dejar el caixer capellà a su casa. Si lo hacéis así, asistiréis a la despedida del caixer capellà por parte de todos los demás caixers i cavallers, y escucharéis en silencio los últimos sonidos del tambor i el fabiol.
Fuente: santjoan.ajciutadella.org